1- ¿Cómo se nombran los organismos?
Los biólogos para estudiar los diferentes organismos que existen, tuvieron que identificarlos a través de un nombre. Para esto, existe una rama de la biología llamada taxonomía, la cual se encarga de nombrar y clasificar los diferentes organismos.
El naturalista sueco Carlos Linneo (1707-1778), estableció la base de la taxonomía. Uno de sus logros más importantes, es que estableció la introducción del nombre científico para cada organismo.
1.1- Nombre científico de un organismo
Cada organismo posee un nombre único formado por dos elementos, su género y especie.
Un género es un conjunto de especies que se encuentran emparentadas, mientras que una especie es un conjunto de organismos que pueden reproducirse en condiciones naturales y dejar descendencia. Sin embargo, una especie determinada no puede reproducirse con organismos de otras especies.
En un nombre científico, el nombre del género aparece primero y luego aparece el nombre de la especie. Por convención general, los nombres científicos se escriben en cursiva.
Observemos el siguiente ejemplo:
1.2- ¿Cómo escribir correctamente el nombre científico de un organismo?
En primer lugar, debemos escribir el género del organismo. La primera letra del nombre de este debe ser siempre en mayúscula.
En segundo lugar, debemos escribir la especie del organismo. La primera letra del nombre de la especie siempre debe estar en minúscula.
En tercer lugar, el nombre completo se escribe siempre en cursiva.
Por lo tanto, siempre debes escribir el nombre de una especie acompañado de su género. Nunca se deben escribir por separado.
Cada nombre científico es único, por lo que referirse a un organismo por su nombre científico elimina cualquier posibilidad de confusión. Por ejemplo, una especie puede tener varios nombres comunes en diferentes países dependiendo del idioma, pero los biólogos de todo el mundo pueden identificar la especie por su nombre científico.
2- ¿Cómo se clasifican los organismos?
Carlos Linneo no sólo desarrolló un método para nombrar a las especies, sino que también implementó un método para clasificarlas. Cada especie se encuentra en una serie de categorías jerárquicamente ordenadas, en función de su parecido a otras especies. Estas categorías conforman una jerarquía anidada, donde un nivel incluye a todos los otros niveles por debajo de él.
Este sistema de clasificación considera ocho categorías principales o categorías taxonómicas:
– Dominio: Corresponde a dos subdivisiones de clasificación de los organismos, procarionte y eucarionte.
– Reino: Señala la clasificación de los seres vivos con respecto a su parentesco evolutivo. Son cinco reinos: Animalia (animales), Plantae (plantas), Fungi (hongos), Protista y Monera.
– Filum o filos: Representa la clasificación de los organismos en cada reino.
Reino animal: Contiene 35 filos.
Reino Plantas: Contiene 12 filos.
Reino Fungi: Contiene 6 filos.
Reino Protista: Contiene 31 filos.
Reino Monera: Contiene 7 filos.
– Clase: Corresponde a un grupo que incluye ordenes de animales y plantas, con características comunes.
– Orden: Agrupación de familias que se encuentran biológicamente relacionadas.
– Familia: Conjunto de géneros.
– Género: Grupo de organismos que pueden dividirse en especies.
– Especie: Conjunto de organismos que pueden reproducirse en condiciones naturales y dejar descendencia.
Estas categorías forman una jerarquía anidada, desde lo general a lo particular. Es decir, se ordenan desde el grupo dominio que abarca las categorías de reino, filo, clase, orden, familia y género hasta llegar a lo más específico: la especie.
Por lo que, se cumple lo siguiente:
– Dominio Contiene reinos.
– Reinos Contiene filos.
– Filum o filos Contiene clases.
– Clase Contiene ordenes.
– Orden Contiene familias.
– Familia Contiene géneros.
– Género Contiene especies.
Veamos el siguiente ejemplo de clasificación:
3- ¿Qué es la filogenia?
A través del tiempo, una especie permanece hasta que, a partir de ella, se originan nuevas especies. Estas, seguirán desarrollando su descendencia. De esta manera, las especies se encuentran emparentadas en mayor o menor grado, ya que poseen una historia de origen y diversificación.
La filogenia estudia el grado de parentesco de un grupo de especies, analizando sus historias evolutivas. Se basa en diferentes tipos de evidencias, especialmente las aportadas por la biología molecular, la cuál se enfoca en estudiar la estructura, función y composición de las moléculas biológicas más importantes como el ADN y las proteínas; pudiendo determinar el parentesco de una especie comparando secuencias de ADN.
El grado de parentesco entre las diferentes especies, puede representarse en árbol filogenético. Este corresponde a un diagrama que representa las relaciones evolutivas de los organismos, representando en cada una de sus ramas un taxón, mientras que el punto en el que se bifurcan corresponde a un ancestro en común.
El proyecto Genoma Humano construyó un árbol evolutivo de la especie humana, a partir de secuencias de diferentes genes que son comunes entre seres humanos y simios.
