¿Qué es la ilustración?
La Ilustración fue un movimiento intelectual y cultural que se desarrolló en Europa durante los siglos XVII y XVIII, aunque tuvo sus raíces en las décadas anteriores y dejó su influencia en los siglos posteriores. Fue un período de profundos cambios en la forma en que las personas pensaban sobre la autoridad, el conocimiento y la sociedad.
Algunos de los países más destacados en los que se desarrolló la Ilustración incluyen Francia, Inglaterra, Escocia, Alemania, Italia y otros.
Francia, en particular, fue un centro importante de la Ilustración y produjo numerosos filósofos y escritores ilustrados, como Voltaire, Montesquieu, Rousseau, Diderot y muchos otros. La Enciclopedia, una obra clave de la Ilustración, fue publicada en Francia y sirvió como un compendio de conocimiento ilustrado.
Inglaterra y Escocia también jugaron un papel importante en la Ilustración, con figuras como John Locke, David Hume y Adam Smith, cuyas ideas influyeron en campos como la filosofía política y la economía.
Algunas características clave de la Ilustración:
– Énfasis en la Razón: La Ilustración puso un fuerte énfasis en la razón y la lógica como guías para la comprensión del mundo. Los ilustrados creían que a través del uso de la razón, la humanidad podía resolver problemas, mejorar la sociedad y avanzar en el conocimiento.
– Rechazo de la Autoridad Absoluta: Durante este período, se produjo un cuestionamiento importante de la autoridad absoluta, ya fuera la autoridad monárquica, religiosa o aristocrática. Los ilustrados abogaban por sistemas de gobierno basados en la voluntad del pueblo y en la separación de poderes.
– Énfasis en la Educación y la Difusión del Conocimiento: Se promovió la educación como un medio para empoderar a las personas y elevar el nivel de conocimiento en la sociedad en general. La creación de enciclopedias, como la Enciclopedia de Diderot y D'Alembert, fue un proyecto importante para recopilar y difundir conocimientos.
– Tolerancia y Liberalismo: La Ilustración también abogó por la tolerancia religiosa y la libertad de pensamiento. Se buscaba superar la intolerancia religiosa y promover una sociedad en la que las personas pudieran expresar sus opiniones libremente.
– Enfoque en la Ciencia y la Filosofía: La Ilustración tuvo un fuerte enfoque en la ciencia, la filosofía y la reflexión intelectual. Filósofos como Voltaire, Montesquieu y Rousseau, entre otros, contribuyeron con obras influyentes durante este período.
– Impacto Duradero: La Ilustración dejó un impacto duradero en la política, la filosofía, la ciencia y la cultura occidental. Sus ideas influyeron en la Revolución Francesa, en la formación de las democracias modernas y en el desarrollo de la ciencia y la tecnología.
1- El hombre ilustrado
En el siglo XVIII emerge un hombre apasionado por el estudio de la ciencia y la filosofía; el hombre ilustrado. Sin ser un sabio profesional ni un filósofo, estudia y se apasiona por todo.
El hombre ilustrado emerge entre miembros de la nobleza y de la poderosa y creciente burguesía (altos funcionarios, fabricantes, armadores, financieros). Ambos grupos se unen en lo intelectual, pero continúan separados social y políticamente.
Los hombres de esta cultura muestran una fe ciega en la razón. A través de ella creen posible asegurar el progreso de la humanidad. Se oponen a toda explicación sobrenatural del mundo rompiendo con la tradición y la religión. A este movimiento intelectual o cultural se le ha denominado Ilustración. Se caracteriza además por su fe ilimitada en la razón, por su fe en la ciencia, por la búsqueda de lo útil y lo pragmático, por un fuerte acercamiento a la naturaleza, todo lo cual conducirá al hombre a su encuentro con la felicidad, meta fundamental en el siglo XVIII.
1.1- Bienestar y crítica
El hombre del siglo XVIII se siente profundamente orgulloso y feliz de vivir en su época y lleno de espíritu filantrópico, intenta comunicar los bienes del progreso a sus semejantes.
Pero critica despiadadamente sus instituciones (monarquía, burguesía y su sociedad en general), para lo que utiliza dos formas literarias originales: los libros viajeros exóticos y las utopías.
La Ilustración se desarrolló alejada de universidades y academias oficiales. Su núcleo de irradiación fueron los salones intelectuales.
Como medio de difusión se emplearon periódicos, libros, folletos y revistas cuyas ediciones aumentaron extraordinariamente y aunque muchas publicaciones eran censuradas o prohibidas por las autoridades reales o eclesiásticas, siempre encontraban un lugar para ser impresas y distribuidas.
En este sentido, podemos resumir los principios de la Ilustración en los siguientes puntos:
– Racionalismo: Todo conocimiento parte de un principio básico: la razón. Aquel conocimiento que no sea racional debe ser rechazado.
– Espíritu crítico: En relación con el racionalismo, se promovía una postura crítica frente a la realidad.
– Búsqueda de felicidad: Sostiene que la felicidad real involucraba acceder a la libertad, la igualdad y la prosperidad privada.
– Creencia en la bondad natural del hombre: Los filósofos de la época sostienen que el hombre es bueno por naturaleza.
2- Los grandes intelectuales ilustrados
El espíritu crítico, la razón y la experiencia, como vías para alcanzar el conocimiento, promovieron más que nunca el desarrollo de las ciencias durante el denominado Siglo de las Luces.
En la filosofía, Francis Bacon plantea su método experimental y René Descartes propone la duda metodológica y el uso de la razón como la base del conocimiento.
En la física, Isaac Newton formuló la ley de la gravitación universal. Con ella consolidó lo iniciado por Galileo y Kepler.
Principales representantes de la Ilustración:
2.1- La obra de Montesquieu (1689-1755)
Montesquieu, cuyo nombre completo era Charles-Louis de Secondat, barón de La Brède y de Montesquieu (1689-1755), fue un influyente filósofo y escritor francés de la Ilustración. Es conocido principalmente por su obra "El espíritu de las leyes" ("De l'esprit des lois"), publicada en 1748. Esta obra es uno de los tratados más importantes sobre teoría política y derecho de la Ilustración.
Montesquieu es famoso por su teoría de la separación de poderes, que influyó significativamente en el desarrollo de sistemas políticos modernos, como la democracia y la república. En su obra "El espíritu de las leyes", Montesquieu argumentó que el poder del gobierno debe dividirse en tres ramas independientes: legislativo (el que hace las leyes), el ejecutivo (el que las hace cumplir) y judicial (el que dictamina justicia).. Esta separación de poderes ayudaría a evitar el abuso de poder y a proteger las libertades individuales.
Sus ideas sobre la separación de poderes influyeron directamente en la Constitución de los Estados Unidos, donde se reflejan en la división de poderes entre el Congreso, el Ejecutivo y el Poder Judicial.
Montesquieu también abordó temas como la libertad, la tolerancia religiosa y la importancia de las leyes en una sociedad civilizada. Su enfoque en la ciencia política y su influencia en la filosofía política lo convirtieron en una figura importante de la Ilustración y un defensor de los principios liberales y democráticos. Fue el propagador en el continente de las ideas políticas del filósofo inglés Locke.
2.2- El modelo de Voltaire (1694 – 1778)
Voltaire, cuyo nombre real era François-Marie Arouet (1694-1778), fue un influyente filósofo, escritor y figura de la Ilustración francesa. Es ampliamente reconocido por su ingenio, su crítica a la intolerancia religiosa y su defensa de la libertad de pensamiento y expresión.
Ya viejo, desde su castillo de Fresnay, Voltaire fue el "rey" de toda Europa intelectual. Sus cartas llegaron a todos los salones ilustrados y fueron leídas con avidez, comentadas y admiradas.
Introdujo en Francia la filosofía de Newton con una prosa fácil y brillante. Se negó a resolver los grandes problemas metafísicos y con su espíritu agudo trató todos los problemas del hombre de su tiempo. Fue el principal impulsor y representante del Siglo de las Luces.
Una política fuerte es – según él – la salvaguardia de la libertad. No cree en la igualdad y le parece beneficiosa la jerarquía social. Considera la educación como fundamental para el progreso, pero ésta no debe generalizarse. En religión es deísta, es decir, cree en un Ser Supremo, pero lo relega a la función de Creador o primer motor de la existencia. Es, además, profundamente anticlerical ("hay que tener una religión y no creer en los sacerdotes"), partidario de las reformas administrativas y civiles (prohibición de la tortura, de la pena de muerte y de las detenciones arbitrarias; mejora de los repartos de impuestos; unidad legislativa y supresión de aduanas interiores).
En sus obras Ensayo sobre las costumbres y el espíritu de las naciones y el Diccionario filosófico ataca los grandes principios de la época y combate el despotismo y la autoridad.
2.3- Rousseau (1712-1778) o el naturalismo ilustrado
Tanto Montesquieu como Voltaire representaban la tendencia racionalista de los ilustrados, pero se produjo también una reacción de carácter naturalista, cuyo representante francés más destacado fue Jean Jacques Rousseau.
La personalidad ardiente y apasionada de Rousseau le llevó a desdeñar los principios fríos y racionalistas de sus antecesores ilustrados.
Las primeras obras de este pensador que alcanzaron resonancia fueron las de carácter social y pedagógico: Nueva Eloísa y Emilio, en las que exponía la virtud de un retorno a la naturaleza, desplegando las naturales cualidades humanas del amor, generosidad y piedad, y abandonando la educación intelectualista por otra basada en los conocimientos físico-naturales y artísticos.
Sus opiniones religiosas son menos audaces que las de Voltaire y Diderot, no así sus ideas políticas, que expone en El discurso sobre la desigualdad y en El Contrato social. El hombre, para Rousseau, es naturalmente bueno, pero la civilización lo corrompe. La injusticia comenzó con el primero que dijo "eso es mío" dando origen a la propiedad, y con ella a esta sociedad. El "Contrato" es un pacto mutuo que une a un hombre (el gobernante) con todos (los gobernados). El régimen perfecto es el democrático, en el que todos los ciudadanos participan de la soberanía, que es la ley como resultado de la voluntad general. La libertad no es más que la obediencia a estas leyes.
3- La Enciclopedia
La obra más representativa del movimiento de la Ilustración fue la Enciclopedia, obra colectiva que se convirtió en la Biblia del nuevo pensamiento libre, y que es el mejor documento para el estudio de las ideas de la burguesía del siglo XVIII.
El primer volumen de la Enciclopedia de Artes, Ciencias y Oficios, con el discurso preliminar de D' Alembert, apareció el 1° de julio de 1751, y la obra pudo concluirse en 1754, pese a todas las prohibiciones. Habían intervenido en su elaboración 130 redactores – entre ellos el sabio Buffon, el fisiócrata Quesnay, Voltaire y Rousseau – bajo la dirección de Diderot. El resultado material fue una obra de 17 volúmenes de texto y 11 láminas, y una multitud de artículos de calidad y doctrina heterogéneas, donde se reunió prácticamente todo el conocimiento de la época.
– El período en el cual surgió la ilustración fue denominado Siglo de las Luces. El término refleja la creencia de que este período se caracterizó por la difusión de conocimiento, la promoción de la razón, la ciencia y la educación, y el cuestionamiento de las estructuras de autoridad y la superstición.
El término resalta la importancia de la Ilustración en la promoción de la iluminación intelectual y el progreso social, y se utiliza para describir un período de cambio significativo en la historia europea y occidental.