1- Rol del hombre y la mujer
1.1- Rol de la mujer inca
Se pueden diferenciar dos tipos de mujeres en el Imperio Inca, la mujer hogareña dedicada a los hijos y a la agricultura y la mujer fuerte, guerrera y dominante.
Las mujeres del pueblo tuvieron que cumplir con las tareas agrícolas y textiles para su familia y el Estado, el poder en decisiones y dominio que tuvo fue de gran importancia. La mujer era el símbolo de la fertilidad.
Su labor primordial era ocuparse de las labores del hogar, cuidar a sus hijos, tejer las vestimentas de la familia, ayudar en el campo, preparar la chicha y salir a trabajar.
Si una mujer estaba embarazada efectuaba una serie de rituales para esperar la buena marcha del embarazo, invocaba a los dioses y multiplicaba sus ofrendas. Su trabajo laboral no variaba durante este período y al tercer día después del parto la madre se incorporaba a sus labores.
La función principal de las mujeres de la nobleza era cuidar a sus hijos, tejer, hilar y preocuparse de su aspecto personal.
“La mujer principal” del Inca, la Coya, tenía un gran prestigio entre las mujeres de la elite cuzqueña, participaba en los rituales, ella dirigía el Cuzco en ausencia del Inca, pero como todas las otras mujeres, ella también vivía en un estado de inferioridad muy marcada frente al Inca.
La mujer Inca era el símbolo de la fertilidad.
1.2- Rol del hombre Inca
La educación del hombre se orientaba según el puesto que le estaba otorgado: como administrador, como sacerdote y como guerrero.
El grupo no privilegiado de hombres eran agricultores y pastores de los pueblos dominados, estaban dedicados a la domesticación de la llama y la alpaca, las que fueron utilizadas para diferentes propósitos dentro del sistema de producción de los incas. Los guanacos eran apresados por su carne que era muy apreciada.
Destacaron en la arquitectura, la simetría de sus construcciones y el uso de colosales piedras que encastran perfectamente sin usar ningún pegamento han llamado la atención de los expertos, también se destacaron por sus obras de ingeniería y sobre todo por la red caminera.
Podían casarse, tener una sola esposa, ellos llevaban una vida muy sencilla .Los hombres de 18 a 50 años participaban en la Mita.
Los hombres que se destacaban en la música, las artes, la guerra u otra actividad no tenían las misma obligaciones que el resto, eran mantenidos por el Inca.
Los hombres que pertenecían al más bajo nivel social eran los sirvientes permanentes del Imperio labor que debían realizar toda la vida y luego ser heredada por sus hijos.
1.3- Rol de los niños
Los niños crecían muy libres dentro de sus grupos familiares y ayudaban en los cultivos y el cuidado de animales domésticos.
Los niños desde los 5 años de edad trabajaban ayudando en las labores del hogar, por ejemplo, buscaban leña, pastoreaban los rebaños, acarreaban agua, cuidaban a sus hermanos, etc.
2- Vida cotidiana
El padre trabajaba para sustentar a su familia y pagaba impuestos; la madre trabajaba en el hogar, ayudaba a su marido en el trabajo y se ocupaba de sus hijos. Los incas plebeyos tenían que educar a sus hijos.
Vivían en casas sencillas, muchas de ellas de una sola habitación principal y muy poco mobiliario, eran casas de piedra y adobe.
Los incas consideraban importante que una pareja casada tuviera hijos, las mujeres incas al dar a luz recibían ayuda de mujeres que habían tenido gemelos y de sus vecinos. Tras el parto a mujer y el recién nacido se bañaban en el río.
La gente del pueblo tomaba dos comidas al día. El plato usual era el chuño, o harina de papas deshidratada. El maíz era bastante consumido que se preparaba hervido o tostado. También preparaban el locro con carne seca o cocida. Comían además gran cantidad de frutos como la tuna del cactus o el tarrol.
2.1- Base de la organización social inca: Ayllus
El ayllu era la base de la organización social inca y estaba conformado por grupos de familias que compartían vínculos en común, ya sean religiosos, políticos, culturales, laborales, etc. Además, poseían tierras que las trabajaban de manera colectiva.
La autoridad de los ayllus era el curaca, quien organizaba el trabajo de la comunidad y se encargaba de distribuirlos al Imperio. El curaca actuaba de intermediario entre el Sapa Inca y los ayllus.
Los incas se basaron su economía en dos principios: la reciprocidad y la redistribución.
La reciprocidad puede entenderse como la ayuda mutua que se brindaban los miembros de un ayllu. Es decir, si una persona ayudaba a otra, está última debía devolverle el favor.
Por su parte la redistribución funcionaba de manera similar al sistema de reciprocidad, pero a nivel más alto, entre los ayllus y el gobierno Inca.
Los ayllus entregaban tributos a los curacas que actuaban como mediadores entre los integrantes del ayllu y el Sapa Inca.
El Sapa inca redistribuía los productos a los curacas y él los entregaba a su ayllu. De esta manera, los ayllu tenían recursos que ellos no producían.
Una de las formas de pagar tributo al Imperio era mediante la mita. Consistía en un sistema de trabajo obligatorio en donde se realizaban actividades mineras, de construcción de puentes, caminos u otro tipo de edificaciones. Las personas eran trasladadas a otros lugares por períodos determinados de tiempo.
El pueblo no recibía ningún salario a cambio de su trabajo, sin embargo, se les daba alimento y vestuario. Si la persona no cumplía con su labor podía ser castigada drásticamente, incluso con la pena de muerte.
2.2- Idioma y sistema de registro incaico
El idioma oficial del imperio inca fue el quechua. Los incas impusieron a los pueblos conquistados su cultura y entre esas cosas era aprender el idioma oficial del imperio.
Algunas de las palabras que utilizamos en nuestra vida cotidiana provienen del quechua.
Por otra parte, ¿cómo era el sistema de registro de los incas?
Los incas no tenían escritura, sin embargo, ellos poseían un sistema numérico decimal de registro y contabilidad llamado quipu. En ellos se registraba la cantidad de habitantes, la producción agrícola, tributos recibidos y otro tipo de información variada.
Constaba de un cordel grueso al que se ataban cuerdas más delgadas y de diferentes colores, además poseía distintos nudos. Había personas especializadas para interpretar los quipus, su nombre era quipucamayoc.
Ejemplo de representación de un número:
Cada cuerda colgante representa un número y se realizan los nudos comenzando desde el valor posicional más alto hasta los de menor valor, siempre dejando espacios entre ellos.
Los dígitos del 2 al 9 se representan según las vueltas que tiene cada nudo.
En la primera o última cuerda se registra el total de la suma.