1- Contextualización
El género dramático es aquel que representa algún episodio o conflicto de la vida de los seres humanos por medio del diálogo de los personajes. Así, la obra dramática ha sido creada para ser representada o interpretada por actores frente a un público, pudiendo estar escrita en prosa o en verso, o bien, combinando ambas formas. Como todo texto literario, la obra dramática posee una determinada organización, es así como estas creaciones poseen dos tipos de estructuras: estructura externa (que contiene aquellos elementos de disposición y distribución de la acción y el conflicto, compuesta por: acto, cuadro y escena) y la estructura interna, cuyos elementos desarrollaremos a continuación.
2- Estructura interna de la obra dramática
En toda obra de este género, reconocemos una progresión temática que le da unidad y coherencia. Esta progresión permite distinguir distintos momentos que estructuran el conflicto. De esta manera, la acción dramática se divides en tres instantes principales:
a) Presentación del conflicto: es el momento inicial que muestra a los personajes en una circunstancia de equilibrio aparente que indica implícitamente la existencia de un problema. Este “problema” se conoce con el nombre de conflicto dramático que es un enfrentamiento de dos fuerzas opuestas, una de las cuales quiere vencer a la otra a como dé lugar. Es la primera instancia en donde se muestran las fuerzas antagónicas; conocer sus propósitos, motivaciones y caracteres podemos reconocer el conflicto. Corresponde al primer acto de la obra.
Para ejemplificar este momento, pensemos en la obra dramática “Romeo y Julieta” (William Shakespeare), en donde la presentación del conflicto se desarrolla en el primer acto, cuando, a través del coro, se anuncia que existen dos familias enemigas en la ciudad de Verona (los Montesco y los Capuleto), diciendo que solo la muerte de dos jóvenes amantes terminará con esta pugna:
“Acto Primero Prologo
(Entra el Coro)
CORO: Dos familias, igualmente dignas y nobles, en la hermosa Verona, donde hemos situado esta escena. Habían derramado por sus odios mutuos, mucha inculpada sangre que mancho manos inculpadas. Sus inocentes hijos pagaron el precio de estos rencores que tomaron su vida. Sus desafortunados amores con su muerte pusieron fin a su lucha. El triste destino de su amor marcado con la muerte y el odio sostenido de los padres, que solo el fin de los hijos logro aplacar, conforman el presente espectáculo de dos horas de duración. Si le prestan atención, intentaremos con nuestro esfuerzo enmendar sus faltas.”
b) Desarrollo: corresponde a la situación intermedia que muestra la progresión de la pugna de las fuerzas en conflicto y que culmina en el momento del clímax, también conocido como el momento de máxima tensión dramática. La pugna entre las fuerzas crece y se producen enfrentamientos por las acciones desencadenadas por los personajes, oscilando entre la tensión y la distensión dramática. Más específicamente, se representa por medio de los actos intermedios de una obra, en el caso de una obra compuesta por tres actos, correspondería al segundo. Por el alto grado de presión psicológica y emotiva que envuelve a los personajes, el clímax es un momento breve, a partir del cual rápidamente se resuelve el desenlace.
Como ejemplo de este momento de acción dramática, podemos mencionar que, en la misma obra que citamos anteriormente (Romeo y Julieta) el clímax comienza en el tercer acto, comienza con una riña donde muere Mercucio y Romeo mata al asesino de este: Tebaldo. Julieta es obligada a casarse con Paris por su padre. Más adelante, en el acto IV, se representa un momento de transición hacia el desenlace, ya que se presentan las consecuencias de los hechos o acciones ocurridos en el “clímax”: Julieta obtiene el veneno que la llevará al lecho de muerte de forma ficticia, durante unas 42 horas y, la noche antes de su boda con Paris, bebe esta pócima.
c) Desenlace: etapa que sobreviene poco después del clímax y en la que el conflicto se ha “resuelto”, se ordenan y explican los incidentes y la acción toma un curso que la conduce a un final. Los personajes obedecen a esta “lógica” interna del mundo dramático en que la que se encuentran insertos. De esta manera, se produce la eliminación de la fuerza antagónica o la desaparición o anulación del protagonista: a favor de uno u otro, el conflicto se resuelve, por lo tanto, la obra dramática llega a su fin.
En el caso de “Romeo y Julieta”, este momento aparece en el acto V, compuesto por tres escenas. Es en este momento cuando vemos que líneas de la acción conducen a la tragedia final: Romeo cree que su esposa ha muerto y se dirige al panteón de los Capuleto, donde encuentra a Paris quien, pensando que Romeo viene a cometer alguna locura con el cuerpo de Julieta lo reta en lucha y, finalmente, muere. Entonces, Romeo toma el veneno que había comprado (tras creer que Julieta había fallecido) y da término a su vida. Al poco rato llega Julieta quien, ya despierta, al ver la tragedia, toma la daga de su amado y decide, también, suicidarse. Las dos familias, al ver el suceso tan trágico que había causado su enemistad, deciden poner fin a su “guerra”:
“EPILOGO
Frente a la tumba de los amantes
PRINCIPE: Doy fe del triste relato que me hicieron Fray Lorenzo y los testigos. Aquí por fin descansan los enamorados. Montesco: levantarás en recuerdo de Julieta la más bella estatua de oro. Oro puro. Montesco: de igual lujo y resplandor harás a su lado la de Romeo. Así en oro serán venerados. En la paz enlutada de este día el sol doloroso no se levanta: Y para ver en la penumbra… es a veces necesario cerrar los ojos. Señores: El perdón vendrá con el olvido. Y el olvido con el silencio. CORO: En la ciudad de Verona. Aquí fue. La marcha aterradora de su amor sentenciado. Aquí. La furia de sus padres. Esa rabia antigua. Esa condena, que de no morir los hijos aun no habría terminado. ¿Ha terminado? Solo su muerte enterró aquel odio de sus padres. ¿Lo enterró? Solo la muerte de los hijos. La muerte de los hijos es a veces la única paz de los padres.”
